Estoy casada con mi marido hace 16 años y tenemos dos hijos adolescentes, el año pasado 2020 con lo de la pandemia, a mi esposo le cancelaron el contrato en el mes de abril, como mucha gente, no estabamos preparados economicamente para ese golpe y la situación he tenido que soportarla monetariamente todo este año.
Nuestra estabilidad de pareja se ha visto afectada, entiendo que mi marido ha estado muy preocupado por que no le sale nada de nuevo trabajo, el es el que esta al frente de los temas de la casa, los temas de la comida, el aseo, la atención de los hijos, las clases virtuales, mientras yo en el trabajo igual con otro tipo de presión. ME aburre esa peleadera de el, por cualquier cosa y sin motivo, por esta situación y esta pandemia nos hemos alejado muchisimo, a tal punto que ya ni intimidad tenemos, desafortunadamente.
Trabajo en esta empresa desde hace 5 años, me va bien, por fortuna economicamente, he podido a pesar de todo, sortear las cosas en el hogar a nivel de plata, me senti muy preocupada en noviembre y diciembre del año pasado, desafortunadamente empezaron a cancelarle el contrato a varias personas de mi división que llevan mas años en la compañia y pense que en ese grupo caeria yo. Seguramente, se me notaba el estres por la situación y uno de mis jefes, de bien arriba, me cito a su oficina y me dijo que, creia en mi, que no esperara cancelar mi contrato, que me tenia en alta estima y que tranquila. El reside en otra ciudad normalmente viene una o dos veces al mes y siempre me toca estar con el, para todos los temas laborales mientras esta en la ciudad.
Desde hace rato tenia la sensación de que le gustaba al tipo, pero por mi condición de casada la verdad ni pensar en nada. Pero a partir de noviembre, sentia que el me miraba con otros ojos, mucho abracito, mucha risa y me invita a almorzar, en la tarde a tomar algo a la salida del trabajo y por eso de la inestabilidad laboral, aceptaba sus «Invitaciones y atenciones», mas ya en enero la presión incremento y ya me hacia la encerrona en la oficina. A finales de enero, tuvimos una reunión y acordaron los grandes jefes que debia desplazarme a otra ciudad, para revisar un tema laboral durante varios dias; viaje y que sorpresa cuando me encuentro en la oficina de esa ciudad al jefe. Me senti incomoda y desde que nos vimos empezo con el acoso. Como estas de linda, me encanta como vises, me encanta como hueles y sentia que me perseguia y desnudaba con la mirada, claro muy respetuosamente.
En la tarde tuvimos una reunión muy corta y salimos para el hotel en el mismo auto, cuando llegamos me invito a cenar y durante la comida me lazo los perros de una, les juro que lo unico que pensaba era en el tema de los gastos de la casa, mi estabilidad laboral, los problemas con mi marido en fin, la cabeza me daba vueltas.
El tipo fue muy amable conmigo y en un dado momento me dijo que yo lo mantenia loco desde hacia mucho rato, que el lo que queria era tener algo conmigo, nos tomamos unos vinitos y que continuaramos bebiendo algo en su habitación. Subimos y de una el man se me lanzo en el asensor , me beso y quede ahi como congelada pero lo peor fue que me gusto, entramos a la habitación siguio besandome y de una me empezo a meter suavemente la mano por entre la blusa, y aho deje de pensar en la casa, se me olvido todo.
Me sentia una mujer deseada, cosa que con mi marido se habia vuelto ya era un tema de rapidin a medias, este hombre -mi jefe- de una forma muy sensual, me llevo hasta la cama , me quito la ropa y yo sentia que estaba fuera de control deseando a que me la metiera y sentir esa sensación de un buena tirada que hacia muchos años no tenia, este señor me quito la ropa interior y me chupo la vagina de una forma que perdi el año, y se extendio a besarme las tetas, las nalgas , la espalda y yo temblaba del placer y de los nervios, no se como y en que momento me puso en cuatro y me lo metio, senti enloquecerme , no sabia que hacer, perdi la cordura y deje de pensar, me entregue.
PAse en algun momento sobre el y pude ver un cuerpo cuidado, pulcro, me guio a que se la chupara y hasta eso me sorprendio con una verga un poco mas gruesa y grande que la de mi marido, deliciosa y despues me sente sobre el e hice lo mio, como me gusta. Fue un coito largo, delicioso y con los vinitos encima peor de rico. Cuando terminamos quedamos ahi en silencio besandonos, senti que ya se hizo tarde, me vesti y sin decirnos nada, me fui para mi habitación. Cuando revise mi movil, tenia 3 llamadas perdidas de mi marido y ni me inmute por devolverlas.
Al siguiente dia, nos saludamos en el loby como si nada, durante el desayuno , hablamos algo de trabajo, pero ya en la tarde antes de regresar al hotel, casi que coordinados, nos contamos que eramos casados, con familia y sin necesidad de problemas. Acordamos vernos a la hora de la cena, luego de comer algo en el restaurante subimos por aparte a nuestras habitaciones, al cabo de una hora, mas o menos, estaba hablando con mi marido, quien como cosa rara estaba de malas pulgas, cuando golpearon en la puerta, a este señor no le importo que estuviera hablando por telefono y me empezo a besar ahi en la puerta de la habitación, me toco terminar la llamada, con evasivas a mi marido que ya estaba bastante aburridor y empezamos otra faena de sexo, delicioso y pecaminoso.
Esa noche si fue mas largo y cada tirito, menos culpabilidad sentia.
De esto hace ya varios dias, van a creer que mi marido ha sido capaz al menos de tocarme una teta o una nalga o decirme estas bonita o hueles rico, o darme un beso bien dado cuando voy o regreso del trabajo. Si, se que esta preocupado, que la situación no da para mas, pero a causa de la pandemia fue que se le acabaron las pocas ganas que tenia de sexo o atender a su mujer.
Con mi jefe he hablado del tema y si quiero mas.
6 Respuesta
A veces pasan cosas como éste caso, yo he pasado por algo parecido en mi empresa donde habían mujeres unas solteras otras casadas con la diferencia que nunca se me ocurrió aprovecharme de una de ellas porque soy casado , pero a veces hay mujeres que tienen una conducta de agradar a los hombres y eso me pasó con una que no dejaba de contemplarme y ser exageradamente atenta en todo momento y en su trabajo mostraba mucha eficiencia, en una cuando ya estabamos solo y por cerrar la jornada laboral me miro a los ojos y se me acercó y besó apasionadamente, yo no dije nada pero la seguí y no parabamos de acariciarnos y solo atiné a irnos a un hotel lo cual ella aceptó y de allí np paramos de hacerlo muy eguido, Mi esposa algo intuye porque no tengo sexo con ella como antes lo haciamos interdiario..Y me ve cansado cuando llego a mi casa…Estamos en un problema , y me enamorado de mi empleada que es mucho menor que yo, pudiera ser hasta mi hija…y para colmo ya espera un hijo mío…Los placeres carnales son tan difíciles de dejar de lado..