¡Tengo tantos deseos de ti! El sólo hecho de imaginarte hace que me humedezca.
A pocos pasos de mí veo la perfecta composición que hacen tu rostro, tu cuerpo y esa mente que me vuelve loca. Te observo mientras caminas y no puedo dejar de mirarte. Detallo el brillo de tus ojos, visualizo tus labios (me muero por besarlos), lentamente mi mirada va transitando por tu cuerpo, recorro tu pecho, tu abdomen; De repente me he quedado absorta en el bulto de tu pantalón, muerdo mis labios y mi imaginación me lleva a un lugar donde la lujuria, la pasión y el deseo hacen de las suyas…
Vamos por un café, durante la charla me concentro en el movimiento de tus labios y siento un cosquilleo en medio de mis piernas. Quiero sentirte, que las yemas de tus dedos rocen mi piel, que tu cuerpo se sumerja en el mío y que al final seamos uno solo.
Caminamos hacia mi casa, recuerdo que está vacía, te invito a pasar. Entramos a mi habitación, me acerco a ti, beso tu boca y nuestras lenguas inician un baile que me incitan a devorarte. Mis manos juegan con tu cabello, se deslizan por tu cuello, tocan tus hombros y bajan por tu espalda. He llegado al punto final de tu camisa, quiero desnudarte, uno a uno suelto los botones de tu camisa mientras mis labios besan tu cuello y mi lengua repasa tu oído. Succiono el lóbulo de tu oreja y mientras te abrazo noto como crece la virilidad en tu pantalón, siento como se endurece y muero por introducirlo en mi boca.
Mi ropa interior se humedece, tu pecho está al descubierto, mis dedos transitan por él, pellizco tus pezones y los acaricio con mis labios, juego con mi lengua y te doy pequeños mordiscos, un gemido se escapa de tu boca y mis ganas de tenerte crecen cada vez más. Besos húmedos contornean tu pecho, invaden tu ombligo y llegan al botón de tu pantalón. Rápidamente lo desabrocho y bajo tu cremallera, veo que estás muy duro y excitado. Introduzco mi mano y libero tu masculinidad, mi mano sube y baja muy despacio, aumento la velocidad y veo el delirio en tus ojos, tu respiración se agita. Beso tus labios y me arrodillo, introduzco tu miembro en mi boca, tus caderas se mueven de atrás hacia adelante, mis manos masajean tus testículos, dibujo círculos con mi lengua, succiono y escucho tu agitación, chupo con ansias, quiero tu orgasmo en mi cuerpo. Siento que ya estás listo, dejo que entres y salgas de mi boca a tu antojo, una descarga espesa y blanca invade mis labios, trago un poco de ella y dejo que el restante se riegue en mi cuerpo. ¡Me encanta que tu excitación moje mis pechos!...
Esta historia continuara…
Gracias por leerme, me encantará ver sus comentarios. En Twitter me encuentran como @isatraviesa1