Realmente jamás me había llamado la atención de manera sexual aunque es un hombre que se ha sabido conservar.
Era un sábado temprano, mi madre había salido y yo por ser temprano baje por algo de desayunar en short y blusa sin brasier, el ya estaba en la cocina, en cuanto entre me di cuenta que lo primero que vio fue mis tetas con los pezones duros y eso me prendió mucho, ya que siempre me ha excitado el sentirme deseada, platique con el un poco y fui lo más provocativa que pude, después de unos minutos y de que el me mirara las tetas y las nalgas le dije que me iría a bañar, procure dejar la puerta del baño un poco abierta mientras me preparaba para bañarme, me desvesti y me toque un poco, ya que ese encuentro me había puesto muy caliente, mientras me bañaba me masturbe pensando en cómo sería tener a un hombre maduro en la cama, salí del baño en toalla y me lo encontré en las escaleras, me miró de arriba a abajo con deseo y puso su mano en su verga que ya estaba súper dura yo sonreí la acaricie unos minutos y me guía mi cuarto. Así estuvimos un par de semanas el comiéndome con la mirada y yo provcandolo hasta la locura.
Llego el día en el que mi madre salió de la ciudad con sus amigas y solo nos quedamos el y yo lo invite a qué viéramos una película, mientras él la escogía yo fui a ponerme algo más cómodo,me puse una pijama de satín, el short diminuto debajo mi tanga negra, la blusa de tirantes y sin brasier, no me quitó los ojos de encima cuando me vio me comunico entera, fui a la cocina por cosas para picar mientras estaba la película y escuché que caminaba hacia allá así que me empine fingiendo buscar algo. Sentí como se acercó a mí pegaba su verga muy dura en mis nalguitas y me decía -eres una puta provocadora- como me calienta que me hablen así, yo me levanté y le dije que no sabía de qué me hablaba, pero aún dándole la espalda, solo sentí una de sus manos en mi cadera pegsndome más a él y su otra mano en una de mis tetas acariciando mis pezones, su mano bajo lentamente hasta mis piernas y después metió la mano en el short, sintió mi tanga mojada y me dijo -te voy a dar bien duro- mientras metía sus dedos en mi vagina, gemí de placer,su otra mano ya había entrado en mi blusa y tocaba mis pezones como maníaco, me dio la vuelta, me sentó en la mesa y me empezó a chupar los pezones mientras con la mano me seguía tocando el clítoris, yo estaba exctaciada, casi gritando, bajo un poco más y puso su deliciosa lengua en mi vagina, ya de por sí empapadas, me me metía los dedos,me pasaba la lengua por el clítoris, me la metía en la vagina hasta que tuve un orgasmo, pero el no paro, siguió estimulandome y yo sentí como mi cuerpo se estremecía por todos los orgasmos que tuve, chorreaba y solo deseaba que me cojiera que me metiera su verga hasta adentro me acerque a su pantalón y se lo quité, y ahí estaba una verga deliciosa que me pedía a gritos que la mamara, se la empecé a chupar y el de estremecía de placer tome su verga y la puse entre mis tetas mientras él las embestía me tocaba los pezones y yo escupía mis tetas y su verga. Antes de que se viniera me tomo de las nalgas me acostó sobre el sillón y puso mis piernas sobre sus hombros mientras me penetraba totalmente, sentí como me embestía y me vine de nuevo, no dejaba de gemir y el me tocaba las tetas y me acariciaba el clítoris, me vine y él no dejaba de embestirme hasta que se vino en mis tetas, y con toda su leche me empecé a tocar los pezones y a meterme los dedos, el solo de verme se le puso dura de nuevo y se empezó a masturbar. Pasados una minutos me dijo que fuera por mí vibrador que lo había encontrado mientras veía mi ropa interior, fui por el y lo prendió, me empezó a estimular el clítoris con él para después ponerme en cuatro y meterlo en la vagina, yo gemía y temblaba, sentí como con su mano me estimulaba y con la lengua me comía todo el culo para después meterme la verga en el ano y así venirme totalmente por la doble penetración, el término en mi culito y nos tiramos en el suelo candados, esa noche dormimos juntos, cogiendo toda la noche