Hubo un verano que jugando fut llegué lleno de lodo, tenía 11 años y dos hermanas de 10 y 8 años, al llegar, mi mamá no me dejó entrar a casa y tomando una manguera me empezó a quitar el exceso de lodo en el patio y me ordenó que me desnudara, desde los 6 años no me veía desnudo, así que a regañadientes empecé a hacerlo ante la mirada burlona de mis hermanas, aunque no hicieron escándalo, y ocurrió que tuve una erección, mi hermana más chica preguntó por qué hacía eso, y mi mamá les dijo que era algo normal y tuvo una plática con ellas, 2 veces más me ensucie igual, mi hermana se encargo de quitarme el lodo con la manguera y la tercera vez se encontraban mi tía y mi prima 3 meses mayor que yo, y también la muchacha que ayudaba en la casa el fin de semana. Estar desnudo frente a mis hermanas lo logre digerir, pero a más audiencia, tenía las bolas en la garganta y las amígdalas en el estómago, mi hermana empezó a echarme agua y me ordena desnudarme, y oh sorpresa, otra maldita erección ante la sonrisa de mi prima en una satisfacción de haberse comido el gato al canario, mi mamá se disponía a salir a hacer unas compras y entre plática le dijo que ya había hablado con mis hermanas, pero siendo mi tía enfermera, le pidió que reforzará la plática y salió al mandado. Mi tía me hace pasar a la sala y me ordenó poner las manos en la nuca, todo era surreal, no escuche lo que decía de manera consciente, mientras manipulaba y daba nombres y contestaba preguntas, en eso escuché la palabra masturbación y la metiche de la muchacha que ayudaba pidió una demostración ante el lema de la pena pasa el provecho queda, y acostado en la mesita de centro, mi tía procedió a estimularme, yo ya había manipulado mis geniales, pero en ese momento se me hizo muy intenso por el golpe de adrenalina, no eyacule fue un orgasmo seco hasta decir basta, esto cambió mi relación con mis hermanas, yo toleraba su presencia pero no de mi prima ni de mi tía ni de la muchacha.
Me hice exhibicionista de mis hermanas y me gustó en cierto modo el don de mando que a veces tomaba mi hermana más grande, a los 12 en exhibición privada eyacule a la vista de mis hermanas que guardaron discreción de manera empírica supongo, situación que se presentó algunas veces hasta que cumplí 13 cuando algo dentro de mí pensó que eso no era incorrecto, aunque entrados en confianza las dejé verme desnudo de vez en cuando y por el doble estándar yo no las vi desnudas en la misma situación que yo, aunque llegué a espiarlas.