Llegábamos de una rumba mi novio y yo nos quedamos a dormir juntos y apesar de estar cansados empezó con su lujurioso juego de seducirme, estabamos teniendo relaciones por la vagina placenteramente cuando de repente me dice que quiere mi ano, siempre decía que no era de mi agrado pero empezó a insistir, hablarme en el oído que deseaba mi ano que lo quería meter allí, que lo quería abrir solo para el, yo empece a excitarme demasiado; el atrevidamente puso su pene en mi ano yo me relaje y lo empujo lentamente me dolía un poco pero me daba placer no fui capaz esa noche de que me lo metiera completamente.
Días después fuimos a un motel de nuevo me dijo que quería volver hacerlo y accedí me puse boca abajo me tiro un escupaso de inmediato masajeo el ano e introducio el dedo luego metió lentamente el pene yo sentía de nuevo un poco de dolor pero le dije que lo metiera completamente al principio le hizo muy despacio y sentía como si tuviera ganas de ir al baño pero cuando lo hizo con mas intensidad y fuerte ¡Dios! Jamas pensé que eso se sintiera tan delicioso me sentía en la gloria no podía parar de gemir yo pensaba que me iba a venir por la vagina por la sensación que eso me producía por el ano me enloquecí le decía que no parara y al mismo tiempo el me decía que se sentía muy rico al final se vino dentro de mi ano y tuve la mejor experiencia anal. Super excitante.