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No había vuelto a abrir Tinder por miedo a encontrarme mi ex, porque nos habiamos conocido por ahí.
El caso fue que regrese a mi pueblo natal y bueno, Tinder siempre te distrae!
Lo abrí porque siempre te promete un nuevo comienzo, como dice del tipo de quien voy a hablar.
Estaba hablando con varios al tiempo, había uno que me llamaba la atención en especial, pero el estaba a Bogotá entonces pues no nos habíamos visto.
Yo tenia un verano considerable, pero igual, no tenia muchas expectativas: más del mismo tipo de hombre que me levanto: un artista. Hablábamos sobre música, política, arte, obviamente.
Reitero, no tenía ninguna expectativa más allá de una charla amena.
Un día, el fue a visitar a su familia a la ciudad mas cercana al pueblo donde vivo y me dijo  quería verme y que iria hasta donde yo estaba. Me pareció un poco arriesgado pero pues, ya no me importaba.
Nos vimos, y la verdad no lo detalle bien. No me causó ninguna impresión, ni buena ni mala.
Recorrimos el pueblo, nos tomamos una cerveza y mientras tanto el trató varias veces de robarme besos que yo sabía esquivar muy bien.
La verdad ya estaba jugando con el.
Me gustaba pero aún no estaba segura, pero cuando me dijo que fuéramos al mirador caminando, le dije que mejor lleváramos mi carro.
Fuimos y cuando parqueamos, cuando de repente el se sube encima mio, y es un tipo gigante, acuerpado. Como yo estaba manejando, el pito se presionó y comenzó a hacer ruido, así que decidí que mejor yo me subiría sobre el, y nos comenzamos a besar de una forma increíble.
El con una habilidad me quita el brasier de una, me coje las tetas delicioso, me besa, baja por mi cuello y me besa mis pezones, ya duritos de lo excitada que estaba.
Sentì su pantalón, ya con su verga super dura pero paré. Lo conocía hacer unas horas, y estaba en mi pueblo, en mi carro.
Pero el siguió excitandome y me mostró la verga: era una cosa increiblemente deliciosa, grande y el estaba super arrecho y ya: hizo que también me mojara y decidímos irnos a un motel.
Un motel en la carretera, super x, el compró unos condones baratos que ahí vendían.
Cuando subimos pues ya teniamos un precalentamiento considerable,el me arrancó la blusa y me la rompió!  Me subió la falda, y descubrió que no tenía panties. Yo asi lo habia pensado ese día, tal vez tentando la situación…
El me la dejó puesta, me mete un dedo, delicioso y se lo chupa. Me suelta el pelo que tenia cojido (soy crespa) y me lo agarra fuerte. Con la otra acerca su pene a mi vagina estrecha.
Yo estaba en cuatro, me lo metió super duro lo que me hizo gritar con una mezcla de dolor y placer.
Tenía ya un veranito, como habia contado…
Y ademas el lo tiene grande, seguimos así en cuatro, fue increible.

Yo gemía durísimo, el me daba nalgadas pero ya se estaba tornando un poco mas violento que lo usual, así que pedí que parara y lo hicieramos mas suave.
Yo no se si sea un problema o una ventaja, pero solo me vengo cuando yo quiera en la posición que decida, entonces nos sentamos, yo sobre el, moviendome en circulos, apretandolo, arañando su espalda, cojiendo su pelo, mientras el hacia lo mismo.
Parecíamos animales salvajes haciendolo!
Me vine delicioso, el siguio dándome mientras me ponia en una pared.
Me dio delicioso hasta que el también llegó.

Esa fue la primera noche con el

Mandarinita Pregunta editada 4 febrero, 2019