Desde hace tiempo ando ganas, mi esposo ya no me folla con esa virilidad, con esas energías. Y yo he dejado de sentirme un poco deseada pero no menos caliente.
Eso me ha llevado a calentar a mí vecinito. Invitarlo a la casa, enseñarle las piernas, mostrarle mis pechos, dejar mi ropa interior tirada, cosas como esas. Me he tocado con recuerdos de su verga marcada en sus pantalones, es un pequeño y aún así me calienta, se que es un problema pero sigo sintiendo esas ganas de probarlo.
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mi esposo trabajaba lejos y cambiabamos constante de domicilio pues el es militar , asi que yo pasaba muy aburrida y con ganas , tambien conoci a un vecinito , de 17 el , pero con muy buen cuerpo y personalidad , y en ese entonces yo de 26 aun estaba en forma , fui su primera mujer y le enseñe muchas cosas , a cambio el me dio muchisimo placer , pues me cogia como yo queria y se lo pedia y siempre me cumplia , pero tristemente se enamoro y tuve que cortarlo y dejarle , sino creo hubiese dejado a mi esposo por ese chiquillo encantador
