Expuesta, dispuesta, vertida sobre un mar de sábanas que arrugaron nuestros cuerpos enlazados, te ofreces como ninfa del deseo, sirena cautivada y vestida de mujer desnuda, de mujer completa, atrevida y dispuesta a todo, en tu absoluta y excitante y voluptuosa desnudez.
Boca abajo, sobre el mar y contra el mundo, extiendes tus brazos y abres tus piernas, obedeces las órdenes precisas revestidas de deseo y ardiente pasión, te despojas de tus miedos y pudores, te exhibes temblorosa y palpitante, sensual en tus lunas y contornos, ardiente en tus suspiros susurrados.
Te muestras ante mí como un tesoro al alcance de mis ojos, de mis manos y de todo mi cuerpo ávido de ti; para mí, como un presente: el regalo exclusivo de tu carne. Te regalo mi carne, es mi ofrenda más preciada, besos tus pies, los acaricio, te excitas y me excito, exploro tu punto “G”, sublime tu rostro, exploras y encuentras mi punto ”G”, me derrito de placer, te muestras feliz y triunfante, tan mujer como siempre te sentí, te presenti’, imagine’!
Te viertes sobre un mar de sábanas revueltas para darte de nuevo como ofrenda, la oblación de tu alma y tu cuerpo sometidos en una nueva entrega sin medidas. De espaldas al cielo, vida mía, para brindarme el cielo en tu figura de nalgas levantadas y anhelantes del roce fustigante de mis manos abrasando tu piel en cada azote, de pechos oprimidos por el peso de tu cuerpo, de piernas separadas incitando a la lujuria, de labios que musitan la súplica constante.
Sirena cautivada y vestida de mujer desnuda, de esclava de los sueños que se vuelven eternos en la fugacidad de nuestras noches, sobre un mar de sábanas que arrugaron nuestros cuerpos enlazados y que ahora se enredan en el tuyo, dispuesto para mí como una ofrenda de mujer entregada y amada.
Tu, sublime Musa que tanto me haces sentir, me seduces a cada instante mas, me enamoras,
Me gusta que así sea, eres tan Mujer, que me sientes y me presientes, que me entiendes y me conoces, me exploras y te dejas explorar para sentir siempre mas sensaciones nuevas y nuestras. Mujer siempre soñada y anhelada, Mujer que penetras en mi alma, mi corazón, en mi cuerpo y en todo mi ser, Mujer que me posees, que te entregas a mí, con tanto amor, con tanta pasión, con tu alma, tu corazón, tu cuerpo, el deseo y el amor nos fusionan en un solo ser, respirando el mismo aire, alcanzando el éxtasis sublímale que tanto hemos esperado y hoy logramos conseguir!
Rugiabis’
